miércoles, mayo 30, 2007

La penitencia de la altura

A propósito de la reacción vehemente de los países andinos ante el decreto de la todopoderosa FIFA de vetar los estadios ubicados en ciudades a más de 2.500 metros sobre el nivel del mar, cabe preguntarse ¿cuál es la altitud exacta de Cuenca?

Frente al redondo número del 2.500, algunos se han puesto a pensar que si Quito queda prohibida, una buena opción es la capital azuaya. Aunque los dígitos de nuestra estatura geográfica no cuadran. Veamos por qué:

La lección de geografía en la escuela obligaba a aprender de memoria nombres y datos. Así, se nos había grabado aquella cifra de 2.460 metros como la elevación de nuestra ciudad sobre el océano.

En la página de la Municipalidad, se dice que la altura de Cuenca varía entre los 2.350 y los 2.550. Hay otras direcciones, sobre todo de difusión turística, que ubican a Cuenca entre los 2.000 y 2.800 metros. Para Wikipedia estamos a 2.550 metros. Según el mapa virtual Google Earth, Cuenca está a 2.558 metros sobre el nivel del mar en la latitud:-02 53873 y en la longitud:-079 00095.

Una medición reportada por el portal Cuencanos.com con un medidor GPS Magellan Explorist 210 señala que el estadio de nuestra ciudad está a 2.538 metros a nivel de la puerta principal, con un margen de error de 14 metros. El parque Calderón está a 2.557 (con un posible yerro de tres metros).

Ante el edicto de la opulenta FIFA, este martes 29 de mayo, dirigentes de la Asociación de Fútbol del Azuay, AFA, con un dispositivo satelital en sus manos, midieron 2.490 metros en el estadio.

Volvemos a la pregunta inicial: ¿cuál es la altitud de Cuenca? ¿Un poquito menos de 2.500 metros o un poquito más? Hay que reconocer que la sentencia es hacia las ciudades y no contra los estadios. Si es así, nos llegará la excomunión de la FIFA también a nosotros.

Entonces, por más que el Deportivo Cuenca clasifique a la Copa Sudamericana, Copa Libertadores o Recopa; o, que Ecuador sea designado país organizador de un campeonato de selecciones como la Copa América, en la capital azuaya no podría jugarse más eventos internacionales.

En una de las paredes externas del estadio Hernando Siles de La Paz (3.672 metros) se puede leer la siguiente frase: "Yo nací entre las montañas. Mi pueblo en Suiza está frente a los cerros más altos de Europa. Por eso la altura no me da miedo." El autor de este pensamiento es Joseph Blatter, el boss de la FIFA. Lo dijo el 10 de febrero de 2.000. Es el mismo hombre que hace pocos días se traicionó a si mismo y a millones de sudamericanos.

lunes, mayo 28, 2007

En la aldea de la furia

La tarde de los sábados es la del sagrado descanso, del hacer algo agradable o no hacer nada, de dormir a pierna suelta, de mirar una película o la liga española de fútbol, del infaltable encuentro deportivo o de la imperdible reunión de amigos o familiares. La tarde del sábado tiene algunas de las horas más agradables de los siete días. Siempre y cuando no sean impedidas por algunos desconsiderados.

Así ocurrió para muchos cuencanos la tarde del sábado 26 de mayo. Los organizadores de un campeonato de indoor fútbol, a la altura del barrio Virgen del Milagro, interrumpieron el tráfico en la avenida Ordóñez Lasso que sirve de acceso a la carretera que conecta a Cuenca con la costa. El acto deportivo formaba parte de las fiestas anuales de este sector.

La obstrucción fue amparada por la propia policía de tránsito. Sin dar mayores explicaciones, y con los consiguientes tormentos y cóleras de los centenares de conductores, unos cuantos uniformados rasos desviaban la caravana interminable por trochas angostas y polvorientas.

Hace pocos años, nada más y nada menos que la Avenida de las Américas, la arteria más traficada de Cuenca, a la altura de la ciudadela Católica, la policía cerró, por varias horas, el tránsito para permitir la inauguración, a todo parlante y tecnocumbieras, de un restaurante. Sí, como lo lee, de un asadero de pollos.

En escuelas y colegios, los demorados adiestramientos para los desfiles o pases de niño por las calles colindantes siguen provocando las mismas molestosas sensaciones entre los angustiados automovilistas.

Leyes hay. Reglamentos sobran. Ordenanzas abundan. Interrumpir el paso vehicular en calles y avenidas demanda de un salvoconducto de la autoridad. Pero acá en “Vandalia”, la norma es la de los hechos consumados, la del “más vivo”, la del prepotente, ignorante y atrevido, la del “yo fui, ¿y qué?”

Por eso, ni mandando a los 130 mejores asambleístas del mundo, con el Espíritu Santo a la cabeza, a redactar la mejor de las constituciones cambiaremos estas aldeanas conductas. La transformación, el cambio, empezando por la educación y el respeto a los demás, no nacerá en Montecristi. Deberá brotar en cada uno de nosotros. En nadie más.

viernes, mayo 25, 2007

La ley del Papá Benigno

Una queja suscrita por padres de familia del colegio Hermano Miguel (La Salle) dice que el lunes 21 de mayo se jugaba una de las finales de fútbol, en el estadio de Cuenca, entre los colegios Benigno Malo y La Salle. Al promediar el segundo tiempo, empezaron las provocaciones a la barra lasallana que ocupaba la tribuna sur.

El partido terminó empatado y siguió con la suerte de los penales. Durante los lanzamientos, el árbitro expulsó a un jugador del Benigno Malo por agresión. Tras los tiros libres, ganó La Salle, cuya barra ingresó a la cancha a festejar el título. Entonces, fueron agredidos con palos y productos de extintores. Los árbitros fueron rociados con una sustancia desconocida.

Lo peor de todo, señala la acusación: el entrenador del Benigno Malo alentaba los ataques. La policía intervino y se llevó a varios estudiantes, mientras que un alumno de La Salle fue ingresado a emergencias de la clínica Santa Ana.

En realidad, esta historia se viene repitiéndose de manera cíclica. Empieza con la inauguración de los intercolegiales, donde, pese a los controles implantados, grupos de jóvenes violentos se convierten en aguafiestas en las afueras del estadio, al provocar y atacar a alumnos de otros centros educativos. Las cuentas pendientes se saldarán en futuros encuentros deportivos, como sucedió este lunes 21 de mayo.

La violencia se presenta en cualquier momento, bajo diferentes disfraces y por cualquier pretexto. Una de esas expresiones comunes de brutalidad se presenta en los encuentros deportivos intercolegiales. El combustible del mal ejemplo, por lo general, es lanzado por el seudo líder estudiantil, el entrenador, el inspector o el profesor de educación física. Son los insensatos provocadores del furor de la masa estudiantil.

Argumentos sobran para fundamentar su irracionalidad. El honor y la historia gloriosa del colegio, la virilidad, el valor o la valentía son manoseados de manera malévola con los muchachos, la mayoría de ellos, convertidos en rebaño de los virulentos.

Escribo esta nota con el orgullo de haber pasado los seis años de bachillerato por el centenario plantel del Benigno Malo, en donde recibí enseñanzas de profesores de la talla de Efraín Jara Idrovo, Flor María Salazar, Luís Sánchez o Vicente Salgado; y he labrado perdurable amistad con camaradas de aula.

Me entristece saber que, en la mayoría de estos actos censurables, suena el nombre del Benigno Malo, colegio emblema de los cuencanos. Aquello del “Papá Benigno”, transmitido de promoción en promoción, y que lo entiendo como una perseverante supremacía en lo científico, cultural y deportivo; hoy, algunos de sus hijos descarriados, lo han trastocado por el influjo de la rudeza, el tumulto y el extravío y no han aprendido que “Alta Petens”, el lema que corona el escudo del colegio, quiere decir “Aspirando a la altura”.

lunes, mayo 21, 2007

Precandidata a la asamblea dice que los cuencanos son los más inteligentes

María Victoria Serrano, 55 años, cuencana de nacimiento, ha vivido 19 años fuera del país y muchos más fuera de Cuenca. Ha sido cónsul de Ecuador en Londres (en los gobiernos de Roldós y Hurtado), agregada comercial de la embajada de Ecuador en Washington (en el gobierno de Rodrigo Borja), directora ejecutiva de la cámara de comercio ecuatoriana-venezolana en Caracas, asesora del diputado Carlos González y de la alcaldía de Quito.

En estos días regresó, después de mucho tiempo, a su ciudad natal para proclamar, medios de comunicación mediante, su candidatura a la Asamblea Constituyente por el Azuay. Saldrá auspiciada por el movimiento Nuevo País del diputado gobiernista Fernando Cordero.

Su estreno en la política no pudo ser más escabroso y desafortunado al lanzarse la siguiente aseveración en el noticiero nocturno de La Voz del Tomebamba del 17 de mayo pasado: “Azuay tiene una característica de su gente muy especial. Es un asunto casi genético. Somos gente pensante, analítica, somos gente in… No quiero ofender al resto del país, pero me siento un poco más inteligente por ser cuencana y la población cuencana analiza y participa, tiene más participación ciudadana. Yo creo que el mensaje y lo que tengo que decir a la ciudadanía cuencana va a ser mejor entendido en el Azuay”. (sic)

¿A cuáles cuencanos se refiere la precandidata? ¿A los indígenas cañaris que habitaban este valle antes de la llegada de los españoles? ¿A los colonizadores europeos que llegaron en el siglo 16, se mezclaron y que hoy integran la mayoría mestiza? ¿O al señorío decadente (y mestizo también, aunque no les guste) que, cada vez más, se sostiene más por el poder económico que por los blasones y las heráldicas?

Es difícil entender que sigan persistiendo caducas teorías del determinismo biológico como aquella de pensar que la inteligencia es fijada solamente por los genes y no por una combinación de factores como afirman los estudios modernos.

Peor aún, es creer en la existencia de inteligencias superiores, como afirma la señora Serrano. Para interpretarle sus palabras, hay que imaginarse que en Cuenca los niños índigos serían la mayoría y que, al mismo tiempo, no debería existir gente con retraso mental y, por lo tanto, médicos o clínicas especializados en este tipo de enfermedades.

Hay mucho de racismo en esas palabras, porque según las mismas, hay una distribución genética en la población cuencana diferente, por ejemplo, a la de la población guayaquileña, lo que llevaría a afirmar que el coeficiente intelectual de los costeños es menor al nuestro.

Es posible que nuestra coterránea, al haber vivido en los elitistas círculos diplomáticos y en las altas esferas del poder haya desarrollado una percepción disparatada de los cuencanos.

El famoso escritor y científico Isaac Asimov dijo lo siguiente: “la teoría de la inteligencia superior es muy conveniente para los que ocupan los peldaños superiores de la escala social y económica. Esta postura es totalmente coincidente con la teoría de la raza superior y los subhumanos, curiosamente sostenida por la biología y sociología nazis”.

viernes, mayo 18, 2007

La pasión se hereda, el vicio también

El niño que sostiene una camiseta de su equipo idolatrado es vendedor eventual en una de las esquinas frente al estadio. La foto la tomé este viernes 18 de mayo a pocas horas del partido entre Deportivo Cuenca y Macará. Él usa un modelo antiguo y sujeta con sus manos el de este año.

Me dice que son las que más se venden. Los compradores son los papás que, con orgullo, transmiten su afición a sus hijos. Y, en verdad, no es común encontrar un descendiente fanático de otro equipo que no sea el de su progenitor, y, mucho menos, si van juntos al fútbol con la ilusión de ganar, de compartir. Son recuerdos imborrables entre padre e hijo.

Pero en esas pequeñas camisetas hay algo perturbador como usted se dará cuenta. Si bien los hinchas quieren las oficiales, con el diseño, colores y auspiciantes de la temporada. Sin embargo, ¿hasta dónde se puede permitir la publicidad de licores en la vestimenta de los menores de edad?

¿Desde hace cuántos años las bebidas alcohólicas se disputan el espacio más privilegiado de la camiseta roja? ¿Diez, quince o más? Es largo y lejano el tiempo en que solo vemos en el pecho de los jugadores los logotipos de “Zhumir”, “Cristal” o “Ron San Miguel”.

Se dirá que ya es una costumbre o, peor aún, una tradición del único representante de Cuenca en la categoría elite del deporte rey. Con el paso de los años, el ícono Deportivo Cuenca se ha asociado con el alcohol. Y esto, debemos reconocerlo es incómodo, por decirlo con benevolencia.

Hay que recordarle al Intendente de policía que el artículo 53 del Reglamento a la Ley Orgánica de Defensa del Consumidor en su literal “n” ordena que las compañías tabacaleras y las empresas que elaboran bebidas alcohólicas no pondrán sus marcas, logotipos y diseños registrados para cigarrillos, productos derivados del tabaco o bebidas alcohólicas, en ningún artículo que se comercialice a menores de 18 años de edad”. Asimismo, el literal “r” del mismo artículo ordena que “no se deberá asociar la salud, el deporte o la atracción sexual con el consumo de bebidas alcohólicas”.

El pasado martes 15 de mayo, el diario Hoy informó que el consumo de alcohol en los ecuatorianos empieza a los trece años de edad. El alarmante dato fue resultado de la Segunda Encuesta Nacional sobre el Consumo de Drogas en Estudiantes de Enseñanza Media 2005, elaborada por el Consejo Nacional de Control de Sustancias Estupefacientes y Psicotrópicas (Consep). Algunos admitieron haber empezado en el vicio antes de los diez años.

Si en 1998, cuando se efectuó la primera investigación, los jóvenes ecuatorianos empezaron a tomar a los catorce años, en tan pocos años, la situación empeoró penosamente. Desde entonces, los fabricantes y comercializadores han ampliado cruelmente su clientela, gracias a “exitosas” campañas ideadas por marketineros indolentes.

Señores de Cristal que auspician al Deportivo Cuenca, señores de Zhumir que publicitan al Deportivo Azogues, cumplan la ley, respeten a los niños. No los vean como sus consumidores potenciales. Quiten la publicidad de licor de las camisetas. Piensen en sus hijos y en el futuro que están sembrando.

Alcance a esta nota: Este lunes 21 de mayo recibí la visita de Juan Carlos García, de la licorera Cristal. Me ha explicado que su empresa no tiene ninguna responsabilidad en la comercialización de las camisetas del Deportivo Cuenca. La misma está a cargo de Marathon. El llamado de este blog va entonces a quienes las fabrican para que retiren esos logotipos de las tallas para niños. De parte del auspiciante del club rojo, García nos ha dicho que ellos no visten con camisetas con el logo de Cristal a las divisiones menores del club, precisamente por el respeto a la norma.

martes, mayo 15, 2007

El C.S.I. ecuatoriano es “Crímen Sin Investigación”

Son las tres de la mañana. Con caras de sueño interrumpido llegan a un barrio mexicano de Las Vegas, Grissom y su equipo de criminalistas. Cada uno carga una caja grande parecida a una de herramientas para vehículos. Pocos minutos antes, una balacera ha dejado dos muertos en la calle. Los cadáveres todavía están ahí. Su primera acción es acordonar el sitio con cinta amarilla en la que se lee “C.S.I. - Crime Scene Investigation” (Investigación de la escena del crimen). Entonces, empiezan su febril y detallada labor de hormiga. Mientras Greg saca centenares de fotos, Nick recoge la más mínima evidencia en pequeñas bolsas de plástico y Sarah busca huellas digitales con la escrupulosidad de un cirujano. Al espacio cercado no puede acceder nadie más que tenga que ver con ellos o la policía. Su misión: resolver los crímenes en las próximas horas… Es el inicio de un nuevo capítulo de C.S.I., la serie de televisión que apasiona a decenas de millones de televidentes cada semana.

Su éxito ha llevado a la apertura de liceos forenses en varios países. En Bogotá, Colombia, este boom ha llegado a la inquietud, por la sobreoferta de escuelas frente a las pocas plazas de trabajo existentes. Pero acá en Ecuador, el famoso serial se transmite a horarios cercanos a la medianoche, casi como un relleno. Ya sabemos que acá la televisión abierta prefiere para el mejor horario de la noche a las fútiles y vulgares telenovelas, marianes y marielas porque suman más al rating.

La relación mental con Grissom y su brigada de forenses me vino a la mente a propósito del crimen que costó la vida a David Ambrosi Alemán la semana anterior. Nuestros C.S.I criollos –policías judiciales- llegaron a la escena de la balacera –calle Juan Jaramillo, a pocos pasos de la discoteca Loft- cuando el herido ya había sido trasladado a la clínica y, sorpréndase amigo lector, los empleados del local de diversión habían limpiado los rastros de sangre y barrido los casquillos. En otras palabras, quedó borrado el escenario del homicidio.

Antonio Idrovo, administrador de Loft, admitió que sus empleados procedieron a limpiar la calle porque “le pidieron unos vecinos”. Cuando llegó la policía “a tomar procedimiento”, como dicen, se recogieron algunos casquillos y frente al típico “yo no vi ni oí nada”, el único testimonio que receptaron fue el del portero de la discoteca. El parte oficial, leído por el Coronel Edwin Aguirre, jefe de operaciones del comando de policía Azuay 6, así lo confirmó. Un documento fundamental para el inicio de la investigación estaba basado apenas en la declaración de una persona.

Para cerrar este episodio de nuestra jurásica pericia judicial, al Dr. Romel Molina, agente fiscal encargado de la investigación, no le quedará más, como siempre ha ocurrido, que basarse en testimonios y analizar otras elementales pruebas como los vehículos involucrados, balística básica, inspección ocular, parafina para encontrar residuos de pólvora en quienes dispararon armas, recabar huellas digitales que no estén malogradas por el paso del tiempo, o como suele suceder casi siempre: la reconstrucción de los acontecimientos en base, en este caso a un solo testimonio.

Acá en Ecuador, la práctica de pruebas de ADN, la reconstrucción facial computarizada, la coincidencia de huellas dactilares en bases de datos digitales, los exámenes de fibras y otros rastros de evidencia, o los resultados de toxicología, son aún sueños inalcanzables. Mientras tanto, a manera de utopía, tocará seguir escuchando a Gil Grissom decir su famosa frase: la evidencia nunca miente.

domingo, mayo 13, 2007

Panda tuvo 3.500 coristas cuencanos

Celulares en alto. Apuntan y click, click, click… Saltan, gritan y se abrazan. Son chicos, la mayoría entre 12 y 18 años, mientras en el escenario han aparecido los miembros de Panda que empezaron a sonar con un intro de piano que, en principio, no reveló que se trataba de “Cuando no es como debería ser”. La histeria se ha desatado. (Ver el video)

Pepe Madero, el cantante con su guitarra y piano, se ubicó a la izquierda del escenario desde la perspectiva del público. A la mitad iba Arturo Arredondo o R2D2 con su guitarra y al otro lado estaba Ricardo Treviño con el bajo. Atrás, como siempre, estaba el corpulento baterista Jorge Vásquez.

Las luces sincronizaron con el ritmo de las canciones en perfecta armonía. El escenario tuvo la cara limpia. Sin una publicidad a los costados o arriba. La atmósfera era la ideal, a no ser por el sonido que, una vez más, fue el punto flaco de la noche –el único-. A más que el coliseo cuencano no ofrece una buena acústica, no nos cansamos de decirlo, aquí también falló algo con el micrófono y la guitarra de Pepe que no sonaron como correspondía.

Los coristas, o sea el público, cantaron todas las canciones. Desde la más conocida y festejada del show “Narcisista por excelencia” (ver el video), hasta las primeras grabaciones del cd “Arroz con leche” como la única lenta y más emo de la noche: “Muñeca”.

El festejo colectivo continuó por más de una hora, luego de revisar su repertorio más selecto, entre las que se incluyeron “Los malaventurados no lloran”, “Cita en el quirófano” o “Patética”. Vino la primera despedida que, todos sabemos, no lo es.

Los coristas pidieron “oootra, oootra, oootra” y tres minutos después regresaron puestos la camiseta del Deportivo Cuenca con el número 9’49 en la espalda, dónde lo único imprudente del acto fue la propaganda de la droga que lo auspicia en el pecho, tratándose de un concierto en el que la mayoría son menores de edad.

La “poción camiseta” tuvo el efecto deseado y obvio. Más fotos, más videos, más flashes y, por supuesto, más saltos con los brazos en alto. Así arrancaron la segunda parte y final del concierto y no podían terminarlo mejor con los extras (el público) cantando a todo pulmón “de rojo te ves bien, combina con tus ojos y tu piel, de rojo te ves bien, rojo sangre” de la canción “Disculpa los malos pensamientos”. Buen punto para un buen final.

Cerca de las diez de la noche, el regreso a casa por las frías avenidas cuencanas recuerda a cada corista que mañana viernes hay clases y que no hay mejor cosa que contar lo que vivió esa noche a sus amigos que no pudieron ir.

jueves, mayo 10, 2007

¿Quién disparó a David Ambrosi?

La noticia cayó como un mazazo en la cabeza de todos los que lo conocemos. Al momento de escribir este blog, David Ambrosi Alemán se debatía entre la vida y la muerte en la sala de cuidados intensivos del Hospital Santa Inés. Una bala ingresó por su frente y salió por el occipital.

Según el operador del 911, se produjo un tiroteo a las afueras de la discoteca Loft, a pocos minutos de iniciado el jueves 10 de mayo de 2007. Fueron cinco llamadas de los vecinos de la calle Juan Jaramillo que alertaron del hecho de sangre a las 00h40.

Sobre la calzada quedaba tendido el joven empresario cuencano de 25 años. Una ambulancia lo trasladó a las 00h43. Según una vecina del sector, alrededor de veinte disparos se escucharon, después de un altercado. Los supuestos autores de los disparos huyeron en una camioneta blanca Silverado. Al mediodía fue detenido el vehículo y su propietario, el lojano Raúl Patiño se entregó a la policía en horas de la tarde y aceptó haber estado en el incidente y haber realizado tres disparos en defensa propia, según su testimonio, luego de una discusión con los ocupantes de un Hummer negro. Tocará a la policía, fiscal y jueces investigar y castigar al o los culpables.

Pero, más allá de las pericias judiciales que vengan, lo que nos estremece a todos es el nivel de inseguridad al que estamos llegando. Hoy por hoy es común, terrible es decirlo, contar muertos y heridos por actos violentos. Este acontecimiento descubre la realidad de Cuenca, que no es ajena al resto del país, con el uso de las armas de fuego.

Solo en el noticiero de este jueves 10, a más de la calamidad arriba descrita, recibimos la llamada de un dirigente barrial, a cuyo hijo, empleado del parqueo tarifado, en la Hermano Miguel y Presidente Córdova, un enfurecido dueño de un vehículo le amenazó con una pistola por haberle puesto un sello de mal parqueo. El hecho ocurrió este miércoles a las 12h30.

Asimismo, vía mensaje sms, en este mismo día se denunció la inseguridad en los alrededores del Terminal Terrestre, en donde riñas y disparos son moneda común.

Por eso, al volver a la pregunta que le da título a este blog: ¿quién disparó a David Ambrosi?, no nos referimos al que haló el gatillo. La respuesta está en una sociedad en plena decadencia, en donde la ley no es la ley; en donde los conflictos ya no se resuelven con el diálogo o, por último, con un par de puñetes –como antes-, sino con balas; en el cual los valores como vida o solidaridad han sido cambiados por desvalores como dinero y poder. También empujaron ese disparo los medios de comunicación adoradores del "dios" rating que hacen apología de las masacres y las drogas -incluído, por supuesto el alcohol-.

Como canta Sting al referirse a los muertos por la violencia: "Lloras tu y lloro yo; y el cielo también. !Qué fragilidad!" ¿Cuántas jóvenes vidas tendrán que apagarse para que nos demos cuenta?

lunes, mayo 07, 2007

El karma de los azuayos

Una especie de penitencia vivimos los habitantes del austro ecuatoriano cuando debemos viajar por tierra. Y es que los australes nos jugamos la vida porque, o nos toca una angosta y serpenteada trocha con precipicios que hacen encomendarnos a Dios y contener la respiración; o, sorteamos a cinco kilómetros por hora, en medio de una cegada neblina, los miles de baches, durante horas y horas; o, delincuentes nos asaltan en medio de vía; o, en el peor de los casos, todas las calamidades a la vez.

Días atrás, la Cámara de la Construcción de Cuenca había criticado las ofertas en palabra y las buenas intenciones en papel, que dejó el gobierno, para salir del apuro, en plena celebración de los 450 años de fundación española de Cuenca.

En la realidad, las obras inmediatas a realizarse este año serán el tramo Chicti-Sevilla de Oro en la vía Paute-Méndez y el desvío de Nulti en la Cuenca-Azogues. Ambas labores estaban presupuestadas desde el año anterior. Y por ahora, pare de contar.

¿Y todas las demás carreteras?

Cuenca-Molleturo-Puerto Inca: Tiene tramos destruidos, en especial desde Molleturo hacia la costa. Además el invierno intenso ha acelerado su deterioro. Los estudios para su nueva traza y reconstrucción serán contratados en este año. En otras palabras, esta vía clave para los azuayos, está verde todavía.

Cuenca-Pasaje: La reconstrucción del tramo entre Narancay y Lentag se ha tardado por los incumplimientos de cancelación de facturas y hoy está abandonada. El otro tramo, Lentag-San Francisco, está en lista de espera. Además, se deben cinco millones de dólares a los contratistas y su reconstrucción cuesta quince millones. Hasta ahora, estamos ya en mayo, no pasa nada, todo sigue igual o peor.

Cuenca-Loja: El tramo Cumbe-La Jarata es un desastre completo. La foto publicada en El Mercurio del sábado 5 de mayo lo dice todo. La empresa privada Caminos, cuencana para más señas, le ha quedado pésimo a su provincia. Caso igual sucede con el tramo La Jarata-Oña a cargo de Concretos y Prefabricados. El Ministerio de Obras Públicas (MOP) propone un arreglo con las constructoras incumplidas para luego entregarle estos tramos al Cuerpo de Ingenieros del Ejército. O sea, un cuento de nunca acabar.

Cuenca-Azogues-Cochancay: La vía rápida Cuenca-Azogues tiene financiado el crítico paso por Nulti, pero va tan lento que da la idea que será la única obra del MOP en esta carretera. Hay atrasos en pagos por seis millones de dólares y faltan nueve millones más para su terminación. Asimismo, los derrumbes constantes y abandonados, hundimientos, baches y falta de señalización a lo largo de este tramo de alta velocidad, nos dicen todo. De otro lado, está pendiente la reconstrucción del tramo Zhud-Cochancay. El consejero provincial Marcelo Sánchez ha cuestionado los compromisos verbales que, por ahora, han resultado ser palabras que se las lleva el viento. El lobby está enterito en Quito.

Las vías al oriente siguen siendo una vergüenza y un mito para los ecuatorianos. Y ni hablemos de las carreteras secundarias. El anillo vial, reparado al apuro en los tiempos de La Josefina, casi ha desaparecido, llegando a la desvergüenza de adjudicarse mutuas responsabilidades el MOP y el Gobierno Provincial del Azuay.

Quejarse de la vialidad en el austro ecuatoriano ha llegado al colmo del agotamiento. Escuchar las lamentaciones es como oír llover. Cambiar los resortes, amortiguadores, frenos y más repuestos es parte del trance de viajar por nuestras carreteras.

Es la misma historia de siempre. Pasan los gobiernos. Pasan los ministros cuencanos. Pasan nuestras autoridades. El abandono y destrucción de las carreteras permanecen por décadas. El maleficio de una vialidad se reduce a, más o menos esto: mientras el tramo 1 está en aceptables condiciones; el tramo 2 está destrozado en proceso de contratación, o sea, en veremos; y, el tramo 3 lo están reparando lentamente y con retrasos en los pagos o con el irresponsable incumplimiento de las empresas contratistas.

¿Hasta cuándo?

viernes, mayo 04, 2007

"Cuídate de los cuencanos"

En la banda sonora de nuestras vidas, ciertas citas de películas quedan grabadas para siempre. Hay las clásicas como "Rosebud..." de Ciudadano Kane o las banales como "Hasta la vista baby" de Terminator 2.

De entre decenas de páginas en la red que se encargan de recopilar y recordarnos esas memorias, nos tomamos un tiempo para escoger aquellas que más nos han marcado. Aquí están algunas:
  • ¡Mediocres del mundo! Yo os absuelvo. (Amadeus)
  • La vida no es más que un interminable ensayo de una obra que jamás se estrenará. (Amelie)
  • Me llamo Lester Burnham… Aquí me tienen, masturbándome en la ducha. Para mí el mejor momento del día. A partir de aquí, todo irá peor. (American Beauty)
  • ¿Hueles eso? ¿Lo hueles, hijo? Es el napalm. Me gusta el olor del napalm, sobre todo cuando amanece. (Apocalypse Now)
  • ¿lnocente? ¿Quién es inocente? ¿Tú eres inocente? Todas las criaturas de Dios asesinan de una u otra manera. Digo, observa el bosque. Una especie mata a la otra. Nuestra especie mata a todas las otras, incluyendo el bosque. Sólo que no lo llamamos asesinato, lo llamamos industria. (Asesinos por Naturaleza)
  • Gracias por no dispararme. (Bowling For Columbine)
  • La fama dura 15 minutos, pero la infamia un poco más (El Informante)
  • Seguiremos adelante porque el terror está en esta misma habitación. (Good Night And Good Luck)
  • Esta es la vida que elegimos. Y una cosa está clara, ninguno veremos el cielo. (Camino A La Perdición)
  • Eres demasiado dulce para el rock’n’roll. (Casi Famosos)
  • Yo quiero matar, robar y ser respetado. (Ciudad de Dios)
  • Si no hubiera sido tan rico, habría sido un buen hombre. (Ciudadano Kane)
  • Es la sensación de contacto... en cualquier ciudad por la que camines, ¿comprendes?, pasas muy cerca de la gente y esta tropieza contigo. En Los Angeles nadie te toca. Estamos siempre tras este metal y cristal y añoramos tanto ese contacto que chocamos contra otros sólo para poder sentir algo. (Crash)
  • ¿Una revolución sin armas? ¿Estás loco? (Diarios de Motocicleta)
  • ¡Ah, la vanidad! Mi pecado favorito. (El Abogado del Diablo)
  • El día de hoy no se volverá a repetir. Vive intensamente cada instante. Lo que no significa alocadamente, sino mimando cada situación, escuchando a cada compañero, intentando realizar cada sueño positivo, buscando el éxito del otro, examinándote de la asignatura fundamental: el Amor. (El Club de los Poetas Muertos)
  • Eres pobre. Eres negra. Eres fea. Eres mujer. No eres nada. (El Color Púrpura)
  • Los amores de verano terminan por todo tipo de razones, pero al fin y al cabo todos tienen algo en común: son estrellas fugaces. Un espectacular momento de luz celestial, una efímera luz de la eternidad que en un instante se va. (The Notebook – Diario de una Pasión)
  • ¿Qué es más obsceno: el sexo... o la guerra? (El Escándalo de Larry Flynt)
  • Yo veo gente muerta. (El Sexto Sentido)
  • Tú nunca pusiste una cámara dentro de mi cabeza. (The Truman Show)
  • ¿Han parado ya de chillar los corderos, Clarice? (El Silencio de los Inocentes)
  • Puede que yo no sea muy listo, pero si sé lo que es el amor. (Forrest Gump)
  • Con tomarse ojo por ojo sólo se consigue que todo el mundo se quede ciego. (Gandhi)
  • Lo único que tiene que hacer es poner un precio. ¿Cuánto vale una persona para usted? (La Lista de Schindler)
  • ¡Hemos ganado 1000 puntos! ¡Un carro blindado, es para morirse de risa! (La Vida es Bella)
  • No te suicides esta noche. (Little Miss Sunshine)
  • Jamás digas jamás. (Los Coristas)
  • Estoy perdida. ¿Eso tiene arreglo? (Lost In Traslation)
  • Lo único peor a que se te muera un hijo es que quiera morirse. (Mar Adentro)
  • Hasta ahora, nadie me ha solicitado el vuelto. (Match Point)
  • Mi pequeña. Mi sangre. Mo Cuishle. (Million Dollar Baby)
  • Enterramos nuestros pecados, lavamos nuestras conciencias. (Mystic River)
  • No quisiera herir tu ego, pero esta no es la primera vez que alguien me apunta con su pistola. (Pulp Fiction)
  • Si vas a colocar tu corazón en una jaula de cristal, ten cuidado de no dejarla al filo del amor. (Ratas, Ratones y Rateros)
  • Si ojos tienen que no me vean; si manos tienen que no me agarren; no permitas que me sorprendan por la espalda; no permitas que mi muerte sea violenta; no permitas que mi sangre se derrame; Tú que todo lo conoces, sabes de mis pecados, pero también sabes de mi fe, no me desampares, Amén. (Rosario Tijeras)
  • Caballo que manda el trote si, caballo que manda el trote no, caballo que manda, le mando le mando, le mando una burra, más, más, más y a trotar y a trotar más, más, más. Cuacomamo, cuaco, cuaco, mamo. ¿Ya merito llegamos? (Shreck 2)
  • Que la fuerza te acompañe. (Star Wars)
  • La soledad me ha perseguido durante toda mi vida, por todas partes, en los bares, en los coches, en las aceras, en las tiendas, por todas partes, no tengo escapatoria, soy un hombre solitario. (Taxi Driver)
  • Siento que el universo funciona a la perfección, pero yo estoy encerrado dentro de mí mismo. En vez de unidad siento aislamiento. (The Doors)
  • Cuídate de los cuencanos. (Qué Tan Lejos)
  • (Aunque no es de una película, la siguiente cita es de "La Marujita se ha muerto con leucemia") Cuencanos: alcohólicos y alborotadores.

(Fuente: www.cinepatas.com)

martes, mayo 01, 2007

La muralla del sol escondido

La tarde de este martes primero de mayo, unos cincuenta cuencanos y turistas, con cámaras de fotos y algunos trípodes instalados, esperaban, con cierta impaciencia, ver “Grafías” del cuencano Juan Pablo Ordóñez, una de las tres obras ganadoras de la novena Bienal de Cuenca.

Su exposición depende del clima y de la hora: debe hacer sol y en el horario de cuatro a seis de la tarde. El astro debe impactar sus rayos sobre las ventanas polarizadas y espejos cóncavos y convexos de colores instalados en las casas ubicadas en la calle Hermano Miguel, produciendo una serie de reflejos en la centenaria fachada oriental del muro del Monasterio de Las Conceptas.

Desde la semana pasada, cuando se inauguró la Bienal, los cuencanos han esperado la ocasión propicia para mirar la obra triunfadora inspirada en el ciclo solar andino. Pero, todas las tardes anteriores el esquivo sol hizo trueque con la lluvia aguafiestas, postergando la exhibición.

Este martes fue diferente. La tarde despejada auguraba buenas noticias. Sin embargo, a esa hora, cinco en punto, la acumulación de nubes en el occidente y unas cuantas gotas amenazaban con arruinarlo todo, otra vez.

El mismo Juan Pablo Ordóñez, con gorra verde, cámara de fotos, lentes y pequeña chiva se impacientaba por el arisco sol. Caminaba hasta la esquina de Hermano Miguel y Presidente Córdova para ver hacia el este por qué, si estaba despejado, no llegaban los deseados resplandores.

Cuando la impaciencia amenazaba con una nueva postergación, de forma súbita brilló el sol, proyectando sobre la blanca muralla la creación plástica y provocando, por unos tres minutos, nada más, el mágico momento. Como dice Khalil Gibran: “Por muy larga que sea la tormenta, el sol siempre vuelve a brillar entre las nubes”.

El tiempo fue suficiente para lanzar los clicks de las fotos y luego felicitar al autor, que nos dijo que son los vecinos de esa calle a los que hay que agradecerles, porque renunciaron a una buena parte de la luz natural al permitir colocar sobre sus vidrios, el papel polarizado de colores que permiten estas manchas de colores y que provocan reflexiones muy personales en quienes las observan.

La obra estará ahí por un año. Así que si alguna de estas tardes está soleada a las 4 y 30, vaya por el Monasterio de Las Conceptas, póngale cámara lenta a su ajetreo diario, cómprese un helado de mora frente a las Catalinas o unos dulces cuencanos en la tienda "El Suspiro" y déjese llevar por las “Grafías” de Juan Pablo.