domingo, abril 29, 2007

Medios a la venta… ¿Quién da más?

El principal problema de esta precampaña y la próxima campaña electoral está oculto. Latente detrás de sutiles formas. El asunto más grave y con serias connotaciones éticas y legales está en el papel que cumplirán los medios de comunicación.

Todos saben que un período de campaña electoral es sinónimo de buenas utilidades para la televisión, la radio, los periódicos y las vallas. Pero ahora, para la elección de los asambleístas constituyentes, los medios deberán limitarse a cumplir el Estatuto aprobado en la Consulta en cuanto a la financiación de la campaña.

El instructivo prohíbe la financiación privada de la publicidad política, como ha sido hasta ahora. En esta ocasión será el Estado el que ordenará la publicidad en términos de igualdad y equidad en cobertura y será el único que podrá contratar la propaganda.

El principio pone en iguales condiciones a todos los candidatos. Aquellas empresas electorales multimillonarias como las de Álvaro Noboa, por ejemplo, tendrán los mismos espacios que los pequeños y modestos movimientos provinciales. Hasta ahí, todo bien.

Lo que el Estatuto no contempla son las manipulaciones inmorales en las que caen varios medios, grandes y pequeños en plena campaña.

Entre estos procedimientos deshonestos anotamos los siguientes:

a) Las transmisiones en vivo del lanzamiento de la candidatura, de las ruedas de prensa o de los cierres de campaña. Recuerde Usted, cordial lector, los últimos días de la segunda vuelta cuando TC Televisión, Gamavisión, RTS y Canal Uno transmitieron en directo y en horarios “triple A” la campaña de Noboa, desde sus humillantes regalos a los desamparados, pasando por las interminables caravanas por las calles, hasta sus incoherentes discursos. ¿Fue un regalo de los canales? Nada que ver.

b) Las entrevistas frecuentes y complacientes tanto en espacios noticiosos como en otros programas –deportivos o de entretenimiento-. Nada de preguntas difíciles, nada de cuestionamientos, nada de recordarles sus traspiés políticos, promesas incumplidas o rabos de paja. Todas son sonrisas bonachonas, todo es “si señor candidato”, toda la entrevista es un camino de pétalos de rosas y sin espinas. ¿Qué motiva estos diálogos indulgentes? Don billete, pues. (Ver “¿Entrevistas pagadas?”)

c) Editoriales, opiniones o comentarios convenientes. Un halago a manera de criterio personal de un comunicador acerca del candidato, puede traducirse en muchos votos para el necesitado polìtico. Recuérdese que la compra-venta de conciencias no solo se da con dinero, también aceptan especies.

d) Debates entre los preferidos. Aunque son las encuestas las que señalan a los candidatos con más opciones para ganar, este recurso de propiciar debates entre favoritos con aquel o aquellos que no lo son, puede presentar serias dudas. Da para pensar que algún interés oculto hay en quien organiza estas discusiones. La cuestión no es tan fácil como decidir la cancelación de este formato comunicacional, porque tampoco se puede dejar de utilizar el valioso recurso del intercambio de ideas entre los candidatos.

Todos los comunicadores tenemos ideología. Nuestro corazón nos inclina a un candidato más que a otro. De por medio pueden haber relaciones familiares o de amistad. Está en nosotros actuar con templanza y equilibrio en la próxima campaña electoral.

Por lo pronto, en La Voz del Tomebamba, estamos preparando unas normas que las haremos públicas a los oyentes y a los actores políticos. En ellas trataremos de darle la máxima limpieza a la comunicación social con los candidatos. Nuestra audiencia lo merece.

(Blog escrito mientras retumbaron espectaculares conciertos de Nine Inch Nails y Radiohead. A todo decibelio)

miércoles, abril 25, 2007

Censuras en la ciudad patrimonio

Esta es la fotografía del artista Santiago Reyes, ecuatoriano que reside en París y que presenta su obra en la novena Bienal de Cuenca. La censura le cayó desde la Municipalidad, bajo el argumento de que es “sexista”.

En una sociedad tan pacata como la nuestra, esta foto que iba a exhibirse en una valla callejera que la verían miles de personas, de todo nivel de educación, edad o creencia, ahora solo podrá verse en una galería entre cuatro paredes.

De censuras y autocensuras hemos tenido en Cuenca verdaderas perlas cultivadas y casos polémicos. Pasando por los finales de los años ochenta cuando se prohibió la exhibición de la película “La Última Tentación de Cristo” de Franco Zefirelli, porque puso los pelos de punta a los curuchupas más ortodoxos; a la disparatada veda de “Guantanemera” por parte de una incompetente y, por suerte desaparecida, Junta Calificadora de Espectáculos Públicos, bajo el pueril argumento de que en la cinta “nunca se escucha la canción que le da título”; o la muestra plástica del quiteño Wilson Pacha, hace pocos años en la Casa de la Cultura, en donde exhibió, entre otros cuadros, escenas de bestialismo (un hombre violando a un gallo, por ejemplo).

Se trató de lanzar una bomba y hacerla explotar en esta sociedad cerrada, dijo entonces un crítico de arte al referirse a la polémica de Pacha. Es cierto, la bomba explotó. Pacha se hizo famoso por el escándalo y no precisamente por la calidad artística de su muestra.

No olvidemos la valla publicitaria de "Estampida en Pelotas", el programa deportivos de Súper 9’49, a finales de 2004 y que se ubicó frente al Supermercado Patricia, la misma que generó comentarios de todo tipo cuando apareció una foto de los cuatro conductores del programa desnudos y tapados sus genitales con pelotas de fútbol. Ahí se aplicó la autocensura.

Volviendo a la nueva controversia, y es que no puede haber Bienal sin polémica, como tampoco un carnaval sin indigestión gástrica, las preguntas que nos hacemos son: ¿Tiene el Municipio competencia para convertirse en censor del arte? ¿Existe una intención de Santiago Reyes de escandalizar a los mojigatos cuencanos?

Talvez como opina un amigo concejal, si se exhibía a dos borrachos comiendo cuy y pegando a sus esposas, no problem con la censura municipal.

Y usted ¿qué opina?

lunes, abril 23, 2007

Una bomba de tiempo con la mecha encendida

Lima, 24 de mayo de 1964: en el Estadio Nacional los seleccionados de fútbol de Perú y Argentina disputan un lugar para concurrir a las olimpiadas de Tokio. 45,000 espectadores colman el local. Va ganando Argentina. A mediados del segundo tiempo, "Kilo" Lobatón logra el empate. Pero el árbitro anula el gol peruano. El público protesta. "Bomba" se arroja al campo. La policía los golpea y en las tribunas la tormenta crece. A los objetos que empiezan a llover sobre la cancha se contesta con balas y gases lacrimógenos. 45,000 personas aterradas no tienen cómo huir. Los estrechos pasillos terminan en puertas clausuradas, conducen a la muerte. Y el retroceso es imposible…

Con estas impactantes frases empieza la novela “La òpera de los fantasmas”, del escritor y periodista peruano Jorge Salazar, sobre la tragedia que cobró la vida de más de trescientas personas, convertida en la más pavorosa calamidad del deporte latinoamericano.

Las puertas del estadio se encontraban cerradas con gruesos candados por disposición de la administración del estadio. Los espectadores encerrados salieron despavoridos y en el tropel murieron oficialmente más de 300 personas entre asfixiados y atropellados. Ya en la calle, la multitud convertida en turba causó destrozos en la propiedad privada en los alrededores del estadio, según se describe en la enciclopedia Wikipedia.

Otros episodios recientes de tragedias deportivas pasan por el del estadio de Heysel, en Bélgica, el 29 de mayo de 1985, en el que murieron 39 personas a causa de una avalancha de aficionados en los momentos previos a la final de la Liga de Campeones entre el Juventud de Turín y el Liverpool de Inglaterra.

Los hinchas más radicales del equipo británico situados en la zona X, muchos de ellos en evidente estado de embriaguez, empezaron a tirar objetos y se avalanzaron sobre los hinchas italianos situados en la zona Z. Se produjo una avalancha y los aficionados de la Juventus, intentando alejarse de los del Liverpool, se acumularon en el fondo de la zona, aprisionados por una parte contra el muro donde finalizaba la gradería, y por otra parte contra las vallas "protectoras" que separaban las gradas del terreno de juego. Cientos de hinchas de la Juventus quedaron aprisionados contra las vallas, que eran fijas y no tenían salidas de emergencia, ante la presión de miles de aficionados.

Estos prolegómenos nos sirven de contexto para denunciar el enorme peligro potencial del estadio Alejandro Serrano Aguilar. El pasado viernes 20 de abril, más de 20.000 personas lo llenaron de bote a bote. Cientos de aficionados se ubicaron en los accesos señalados para el tránsito o junto a las salidas –moneda común y de libre circulación cuando se dan encuentros atractivos-. La sobreventa fue evidente. Hay que sumarle la masiva y vergonzosa ingestión de alcohol, asunto que le convierte en la cantina más grande del mundo.

Ahora bien, ¿usted se imagina qué sucedería si se reproducen los eventos previos de las tragedias de Perú y Bélgica, en el estadio de Cuenca? Pero el potencial peligro no queda ahí. Lo más grave es que las puertas del estadio cuencano se abren hacia adentro, según denunció este lunes 23 de abril, en el noticiero de La Voz del Tomebamba, el Dr. Fernando Figueroa, bombero y médico del Hospital Regional.

Sobrecoge a uno la sola imaginación de un evento que genere el impulsivo y violento deseo de la masa de aficionados de salir fuera del estadio y encontrarse con las puestas cerradas y, peor aún, que no se abren hacia afuera.

La indolencia, la ambición y el desinterés de los organizadores junto con la temeridad, el aturdimiento, la imprevisión y la insensatez del público pueden provocar el estallido del cóctel de la muerte.

Falta entereza de nuestras autoridades. ¿Por qué no empezar clausurando el estadio hasta que por lo menos cambien la dirección de sus puertas? ¿Quién controla la sobreventa de boletos, o es que acaso, hay que aprovechar la ocasión, en agravio de la seguridad? ¿Hasta cuándo permiten que, horas previas al partido, desde camiones repartidores de licor estacionados frente a las puertas del estadio, bajen las jabas de trago de la manera más descarada y sinvergüenza?

Las autoridades tienen la palabra. La mecha está encendida.

domingo, abril 22, 2007

Que pase La Dueña, le estábamos esperando

Un domingo a mediados de 2006, aprovechando un paseo familiar, puse en el reproductor de discos los bocetos de las nuevas canciones de uno de los grupos más importantes de la escena rock cuencana en la última década: La Dueña.

En una suerte de grupo focal hogareño, en la que la variedad de edades armonizaba con los gustos de los examinadores: ecléctico, clásica, electrónico, alternativo, y emo –o podría caber “ema” por el género-, los comentarios fueron de diverso tono: “Muy ochenteros”. “Las baladas me gustan más que las movidas”. “Las mejores son la 3, la 5 y la 9”. “La letra de la 11 es la mejor”.

El ejercicio valió para luego expresarle a Fabrizzio Vásquez, bajista y tecladista del grupo, lo que considerábamos como fortalezas y puntos flacos de esos borradores sonoros. Ese mismo trabajo crítico lo hicieron con otros amigos que los analizaron y opinaron.

Luego vino el proceso de grabación en serio, la selección de once de las veinticinco pistas originales, la masterización en el estudio del prestigioso ingeniero de sonido Andrés Mayo de Argentina, la producción del diseño de la portada y la grabación, hasta las cinco de la mañana, del primer video clip del álbum.

El viernes 20 de abril fue el día en que Cuenca conoció del nacimiento de la nueva “guagua” de La Dueña. Sus cuatro integrantes visitaron varias radioemisoras presentando “Por Tu Amor”. Para algunos, la primera sorpresa era conocer que, después de la salida de Toño Peña –quien vive ahora en Manta-, el nuevo cantante es el próximo comunicador social Hernán Montalvo que, a sus 23 años, contrasta pero no desentona con sus tres treintañeros compañeros: Fabrizzio, Remigio Abad (bateria) y Carlos Ortega (guitarra).

“Por Tu Amor” sorprende desde el inicio con una entrada de teclado, en el que se nota el acabado que le dio Andrés Mayo. Tiene un “loudness” que, escuchado con audífonos se parece al Journey del cd “Escape”. La “power ballad” tiene un sostenido solo de guitarra, una contagiosa melodía y un final de bateria decreciente que recuerda a Neil Peart de Rush, con permiso del canadiense.

En medio del indetenible proceso de evolución del rock, que, quiérase o no, va remolcado por las nuevas tendencias globales, el shock del nuevo milenio para las bandas de los noventa terminó por jubilarlas a algunas antes de hora. Es por eso que, en el caso de La Dueña, el rock cuencano les tenía reservado un asiento desde hace tiempo. Enhorabuena.

jueves, abril 19, 2007

Viaje al fondo de la irritación

Es lunes 16 de abril y de acuerdo al noveno dígito de mi cédula, tengo plazo hasta ese día para presentar la declaración mensual del IVA. Con los papeles en la mano ingresé a la agencia del Banco Pichincha de la Avenida de las Américas y Ordóñez Lasso a las 13h45. Una serpenteante y enorme fila de unos treinta clientes miraban, con desesperación y muertos de hambre, como los minutos avanzan más rápidos que ellos.

Decidido a soportar el padecimiento me ubiqué al final de la cola que, de tan larga, había rebasado las cintas divisoras. A los diez minutos, el guardia se acercó a decirnos, con su acento costeño, que no se estaba recibiendo ningún pago del SRI. La típica e irritante salida del “no hay línea”, que no es otra cosa que una demostración de ineficiencia, ya casi no necesita una explicación.

Sugerencia: Colocar un letrero que diga, por ejemplo: “Estimado cliente: en este momento lamentamos no poder atenderle en los siguientes servicios: pagos de planillas de luz, pagos del SRI y cobros de cheques. Como siempre, nos quedamos sin línea”. Con esto nos ahorran algo de tiempo y enfado.

La siguiente parada fue en la agencia de El Arenal, en donde es tan difícil conseguir estacionamiento como ser atendido con presteza por los dos únicos cajeros. En esta ocasión, la fila era tan grande que se salía hacia la calle. Para colmo, a esa hora -14h10-, caía una llovizna. El guardia que también es costeño o peruano, quien sabe, nos responde que tampoco hay línea para el SRI.

Mascullando la pésima atención y ante la urgente necesidad de realizar la transacción, no quedaba otra que buscar otra agencia. Llegamos al local de la Remigio Crespo. De nuevo la hilera saltaba hasta la avenida. Pero esta vez, el guardia también costeño, nos confirmó que sí se estaban haciendo las transacciones del IVA. Alivio en medio del coraje.

Ahora a esperar, esperar, esperar y seguir esperando. Hasta que llegó una señora con un bebé en brazos, un ardid que nadie de los desesperados de la fila se lo tragó. Las miradas envenenadas se clavaron sobre la dama y las murmuraciones generales hicieron desistir a la mujer engañosa.

Todos deseaban que no lleguen ni embarazadas, ni viejitos porque no hacen fila; que a algún cajero no se le ocurra cerrar la ventanilla ni para irse al baño; que más bien abran otra de las tantas ventanillas siempre desocupadas; que no esté delante de uno algún depositante lleno de paquetes de billetes y sueltos o alguna fragante vendedora de cebollas del mercado que saca de su delantal a cuadros un paquete de billetes arrugados y húmedos.

Los celulares sonaban y los que contestaban respondían con cierto fastidio “aquí en el banco; esta muy larga la fila”, para justificar su atraso. Es decir, a esa hora, casi todos los exasperados clientes estaban demorados, cansados y disgustados porque hoy no habrá siesta.

A las 15h15 por fin avancé hasta una de las dos cajas. Con amabilidad fui atendido por el cajero y, en menos de tres minutos, salía del banco pensando que la única manera de exorcizar todos los demonios que se me metieron adentro, era escribiendo este blog.

martes, abril 17, 2007

En Azuay ganó el Si… chupo

Un experimentado bombero tenía un buen motivo para haber invitado a sus amigos a jugar poker la noche del viernes 13 de abril. Mientras repartía las cartas predijo que no habría emergencias de importancia que, como en otros fines de semana, le hubiesen obligado a salir con prisa para atenderlas y a abandonar a sus huéspedes.

El radio handy que colgaba de la correa de su pantalón, no sonó durante las varias horas de juego. “Ojala todos los fines de semana declararan la ley seca” nos dijo en serio y en broma.

Paúl Matute, operador telefónico de la red de emergencias 911 también pasó un fin de semana tranquilo, al igual que Daniel Durán, controlador de las cámaras de video vigilancia del Consejo de Seguridad. De sábado a domingo no se reportó un solo accidente de tránsito. Apenas una emergencia médica, algo increíble. Era el caso de un ebrio intoxicado que fue trasladado al Hospital Vicente Corral Moscoso. También se reportaron dos altercados familiares: una niña golpeada por su padre y una esposa maltratada por su marido. Casi seguro que en estos dos actos cobardes, el alcohol actuó como combustible. En total: tres emergencias médicas y nada más para toda la noche del sábado y madrugada del domingo.

Para la mañana del domingo, día de la consulta popular, el Jefe del III Distrito de Policía, coronel Raúl Ribadeneira, informó que habían sido detenidas 132 personas en estado de ebriedad solo en la ciudad de Cuenca.

La cifra avanzó a 202 hasta el mediodía del lunes, llevando al tercer distrito de Azuay y el austro al impresionante número de 658 detenidos. En ninguna otra provincia o región del Ecuador se registró una mayor cantidad, con lo que quedamos, nuevamente con el nada ostentoso primer lugar de alcohólicos pillados por la ley seca. Lo mismo había pasado el 26 de noviembre cuando se realizó la segunda vuelta electoral.

A propósito, un nuevo estudio a nivel mundial señala que uno de cada tres chicos que empiezan a beber a los 14 o 15 años, terminará como un adicto. Y si hay antecedentes de alcoholismo en la familia, algo muy probable entre los cuencanos, el riesgo sube a uno de cada dos.

El dato más preocupante es acerca de los niños que empiezan a beber a los 13 años. Si tienen antecedentes familiares, los cálculos estiman que el 57% serán alcohólicos.

Mientras tanto, la publicidad de las bebidas cada día se enfoca a adolescentes y a niños. Recuérdese que el video de “Switch” transmitido por la televisión nacional era en dibujos animados con personajes juveniles; o que las vallas en las avenidas muestran a sonrientes y adolescentes modelos levantando las copas; o, que la aparición de coloridas bebidas con bajo contenido alcohólico y con sabor a frutas son dirigidas a los menores de edad.

Con motivo de los actos por los 450 años de fundación, Cuenca recibió el título de ciudad saludable, gracias al buen índice de cobertura en salubridad, agua potable y alcantarillado. ¿Saludable? ¡Qué ironia!

viernes, abril 13, 2007

Un fosforito celebra a Cuenca

A las 7 de la mañana del 12 de abril Freddy Saguay reportó por la radio que la vieja cumpleañera Cuenca amaneció con limitado tránsito vehicular, resguardo policial en el centro, edificios públicos embanderados y el parque Calderón engalanado. Después de varios días de húmedas mañanas con lluvias desde antes de las seis, la ciudad arribó a sus 450 abriles en plena mudanza a una sociedad más abierta y globalizada, desechando poco a poco sus atávicas costumbres.

A esa hora, teníamos pocos minutos para presentar las noticias que marcaban la jornada. Desde un incendio en la iglesia de La Merced, los saludos a Cuenca por parte de las autoridades, la reseña de actividades oficiales de la fecha conmemorativa hasta la agenda de festividades. Es que a las 7 y 30 debía llegar a La Voz del Tomebamba el presidente de la República, Rafael Correa.

A las 7 y 20, el operativo de seguridad estuvo desplegado. Algunos curiosos que querían saludar al mandatario se asomaron por la esquina de Benigno Malo y Muñoz Vernaza. Los funcionarios de la Sala de Prensa tomaron posiciones para sacar fotos y videos. La policía cerró el tráfico por el sector. Llegó la Secretaria de Comunicación Mónica Chuji y nos informó que el presidente estaba en camino.

A las 7 y 30, hora señalada para iniciar el encuentro, llegó Gustavo Cardoso de radio Ondas Azuayas con quien compartimos la tarea. Se enlazaron cuatro radios para el efecto. De un momento al otro, arribó el presidente. Entró directamente a la cabina de la radio. Vestía un elegante terno azul marino, camisa blanca y corbata a rayas diagonales. Saludó con amabilidad a los panelistas y nos contó, extra-micrófono, que apenas duerme cinco horas al día en la sierra y seis en la costa. Estaba molesto, no con nosotros, sino con Jorge Ortiz y Teleamazonas por la cancelación de la entrevista que tenía pactada justo antes de la nuestra.

Antes de arrancar con las preguntas y respuestas, mostró su preocupación con Mónica Chuji, quien le informó algo acerca de un diputado y le preguntó al presidente si lo pone en la lista. No sé si se refirió al diputado destituido Alfredo Serrano, que pocos minutos antes lo había criticado con dureza ante Jorge Ortiz y tampoco a qué lista se referían, pero me quedó esa impresión.

A las 7 y 35 nos zambullimos en las preguntas y respuestas. El programa duró 53 minutos, durante los cuales se refirió a temas como la consulta, la relación con los medios o los plenos poderes de una futura Asamblea Constituyente. También hubo tiempo para pedirle explicaciones acerca de la vialidad del austro, del presunto intercambio de favores en Hidropaute, del maltrato en las embajadas o de las malas premoniciones económicas del FMI para nuestro país en 2007.

La última vez que pude entrevistar en vivo al Economista Correa fue en noviembre de 2006, en plena segunda vuelta. De entonces a ahora, he podido percibir algunos cambios obvios. En noviembre era el candidato, hoy es el presidente. Pero lo que más me llamó la atención es que su estilo de confrontación ha crecido. Ha subido más la guardia y devuelve a las preguntas de los periodistas con golpes directos o indirectos, convirtiendo el acto en defensa-ataque, colocándose en ese papel peligroso de encontrar fantasmas en donde no siempre los hay.

Pese a todo, el presidente, finalmente se despidió con amabilidad, agradeció a los comunicadores de Cuenca y saludó a Cuenca en su fecha recordatoria.

El punto negro de este encuentro se dio luego, al salir de la cabina, después de estrechar las manos de quienes le entrevistamos y cuando empezó a buscar la salida hacia la calle Benigno Malo, nuestro compañero de la radio y colega de Teleamazonas, Carlos Ochoa, lo esperaba en el pasillo, cámara en mano, por donde debía pasar para hacerle un par de preguntas. En una reacción inadecuada e intemperante, el mandatario dijo “¿quién es este malcriado que se cruza por el camino del presidente?”, lo que provocó la reacción de los elementos de seguridad que le rodearon y, uno de ellos con su mano, tapó el lente de la cámara y, con violencia, la bajó hacia el suelo. La acción duró pocos segundos. El Economista Correa recapacitó y dijo: “déjelo capitán, porque le voy a responder”. Entonces criticó a Jorge Ortiz por no haber venido a Cuenca a entrevistarlo, por lo que tuvo que cancelar la entrevista, dejando en claro que no aceptaba que sea vía satélite. Salió de la radio y se fue en medio de un impresionante operativo de seguridad.

Fin de este nuevo encuentro con periodistas que tuvo este remate inesperado, exagerado, pero sobre todo, lamentable.

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Para el noticiero de este viernes 13 de abril, Pierina Correa, se sentó en la misma silla que el día anterior ocupó su hermano menor. Fue ella la que mejor nos pudo explicar por qué el presidente tiene esas reacciones y creo que lo definió como solo lo puede hacer alguien que lo conoce desde niño. Pierina dijo de su hermano: es un fosforito.

martes, abril 10, 2007

Green Day está en Ecuador y talvez en su jardín

La famosa anécdota cuenta que un grupo de arqueólogos norteamericanos, en 1974, descubrió en Etiopía, el esqueleto del prehomínido más antiguo que se haya hallado. Una mujer de un metro de altura que murió a los 20 años y cuya osamenta tiene la enorme lejanía de 3,5 millones de años.

A la hora de bautizarle, los investigadores por unanimidad escogieron el nombre de Lucy, en recuerdo a la famosa canción de The Beatles, “Lucy In The Sky With Diamonds”, y, en especial, porque era el tema que escucharon la noche posterior al descubrimiento.

Una historia parecida se repite en estos días, pero esta vez es más cercana porque nos relaciona a los que habitamos en el sur andino ecuatoriano.

Una expedición de botánicos suizos vino a nuestro país en febrero de 2006. El Dr. Jason R. Grant, un profesor e investigador, junto a un grupo de estudiantes descubrieron una nueva variedad de gencianas, que en el idioma quechua se las conoce como “phallchas”.

Estas plantas tienen una flor a la que los incas le daban efectos mágicos. Según el diccionario quechua-español, sus botones se emplean en infusión para la tos, pulmonía, ronquera y otros males. Además son muy utilizadas como obsequios amorosos en las zonas andinas y han dado lugar a canciones festivas en Perú.

Pertenecen al género de las macrocarpaeas. 85 de sus 105 especies han sido descubiertas en los andes. ¿Qué tiene que ver esto con Green Day? La respuesta es simple: acaban de bautizarle con el nombre del trío punk rock de Berkeley, California a esa nueva variedad. Su nombre científico es el de Macrocarpaea dies-viridis.

En latín las palabras dies-viridis significan “día verde”, o sea “green day” en inglés. Su nombre fue puesto porque los investigadores escuchaban “American Idiot”, el famoso álbum de la banda cuando se trasladaban en su vehículo y en las noches cuando se reunían en algún lugar no especificado del sur andino ecuatoriano.

En la jerga de los rockeros de su ciudad natal, un “green day” significa un día en el que no se hace nada más que fumar marihuana. De ahí nace su nombre. Entonces, las coincidencias con las plantas y esta banda regresan en esta vez con un vínculo geográfico a nosotros, rockeros que esperamos algún día verlos en vivo, porque son espectaculares. Basta verlos en el recomendado dvd “Bullet In A Bible”.

domingo, abril 08, 2007

Luchito, misericordioso y vengador

Parco y vestido de terno claro, el capitán Vinicio Luna ingresa nervioso al set del programa de chismes de la farándula criolla “Vamos Con Todo”. Sus amigos Ángelo Barahona, Jessenia Jati, Paloma Fiuzza, Oswaldo Segura y Janine Leal lo reciben afectuosamente. Es de esa misma manera como sucederá la entrevista, si así puede llamarse a eso que más parecía a una conversación de camaradas en un bar. Luna respira tranquilo. Sonríe y se sienta en la butaca en medio de ellos.

Los asentimientos condescendientes se mezclan con los escotes, extensiones, pestañas postizas, maquillajes, botox y siliconas convirtiéndolo todo, incluyendo a la entrevista, en un solo artificio. Bueno, no se puede esperar más de nuestro periodismo de comadreo.

Más bien, los temas que pellizcan la conciencia de Luna y que son los mismos que inquietan a la teleaudiencia quedan de lado y lo que podía haber sido un buen trabajo de escrutinio periodístico termina en meras intenciones.

Al final, los abrazos, besos y agradecimientos de los entrevistadores caen como dulces indulgencias dentro de una sociedad que hace un año condenaba el tráfico de personas, utilizando el nombre de la Federación Ecuatoriana de Fútbol, FEF.

La FEF es un ente privado y que, bajo este argumento, puede decidir lo que le venga en gana. Por esto, su presidente Luis Chiriboga y su directorio decidieron reintegrar a Luna como coordinador de selecciones nacionales hace pocos días, desatando una polémica enorme que ha provocado la queja pública de algunos de sus miembros, como el alcalde de Azogues y presidente del club del mismo nombre, y la renuncia del Coronel José Ribadeneira, miembro de la Comisión de Selecciones.

En el otro lado de la polémica está otro incriminado por la justicia, esta vez deportiva. Agustín Delgado, el referente de la palabra Ecuador cuando alguien pisa tierras extrañas, es víctima del odio y de la revancha por parte de la misma FEF. El goleador histórico de la Tri hoy es reo de su mal comportamiento en el partido Barcelona-Liga de Quito al finalizar 2006. Luego de los incidentes fue castigado con la suspensión de un año calendario, exagerada a decir de muchos, tomando en cuenta la magnitud real de los hechos y además que el Tin está en el ocaso de su carrera y esa sanción ha caído como su lápida.

Hace pocos días, la FIFA, es decir, el organismo mundial del fútbol, ratificó la sanción al jugador. Lo que ha desatado la otra gran polémica es que ha sido el directorio de la FEF el que pidió e insistió en la ratificación de la pena al deportista.

El columnista Xavier Lasso escribe en El Comercio el pasado jueves 5 de abril lo siguiente: Lo que en el fondo se “castiga” es el atrevimiento del Tin Delgado de reclamar los premios ofrecidos por las clasificaciones. El Tin levantó su voz, protestó. Eso es lo que no perdona el estilo de Luis Chiriboga: sus muchachos tienen que ser sumisos, sobre todo porque la única relación que vale es aquella que heredamos de la hacienda.

Volviendo al caso de Luna, Diario El Telégrafo informó el 4 de abril que la FEF violó el Código de Ética de la FIFA al haberle reintegrado. El artículo tres es claro: "Se elegirá como funcionarios oficiales y miembros de órganos únicamente a aquellas personas que se destaquen con una conducta moral intachable y se comprometan a acatar sin reservas las disposiciones del presente Código Ético. Toda persona que no cumpla o deje de cumplir estas condiciones no es ni será elegible como funcionario oficial o miembro de órganos, o se le retirará de su cargo. Igualmente, se excluye a toda persona con antecedentes penales y cuya condena no sea compatible con el desempeño de su cargo”.

Luchito, le dicen sus amigos, los de la manada de la hacienda llamada FEF, los periodistas que le dicen si y asienten en coro. Los de los viajes con todo pagado. Misericordia para Luna, venganza para el Tin. Silencio en los grandes medios de comunicación. Esto solo pasa aquí, en Ecuador, mi paìs.

jueves, abril 05, 2007

Con fecha de caducidad

Una soleada mañana de domingo, a principios de los ochentas, se presentó en el estadio, ante miles de ansiosos y bulliciosos niños y adolescentes cuencanos, un grupo de cinco famosos chicos que se distinguían más por su coreografía y facha, antes que por sus dotes de cantantes o músicos.

Vinieron en el apogeo de su celebridad. Tanto fue así, que llegaron en su jet propio que tenía pintado su nombre en el fuselaje. Esa explosión de popularidad, en ese momento llamada Menudo, abrió paso para que cada una de las siguientes generaciones de púberes tengan su ícono referencial de idolatría fugaz.

El marketing, que ve todo bajo la óptica del lucro, descubrió a inicios de los ochentas, que los niños y los adolescentes son los consumidores menos exigentes cuando de música se trata.

Así nació el proyecto, más bien la empresa puertorriqueña, llamada Menudo con chicos que se reciclaban, porque a su creador, el panameño Edgardo Díaz inspirado en los Jackson 5, se le ocurrió la fórmula de reclutar niños de 12 años y desecharlos a los 16.

Lo que Díaz no advirtió es que cuando alguno de los jóvenes famosos abandonaban forzosamente el quinteto, también se iban con él sus fans. Y además, llegó el hastío y la falta de innovación que terminaron por agotar a los pequeños consumidores.

Luego vinieron Los Chamos en Venezuela, Timbiriche en México, Bandana en Argentina, New Kids On The Block en Estados Unidos, entre otros. Todos ellos compartían las caras bonitas y el baile sincronizado como elementos indispensables por sobre el talento, la voz o las dotes musicales que poco o, más bien, nada importaban a los empresarios-productores.

Hoy y mañana, la fórmula seguirá siendo exitosa porque siempre habrá nuevas proles que serán sorprendidas y fascinadas por las empresas del marketing del espectáculo. Solo es cuestión de esperar el lanzamiento de la telenovela. Luego vendrán los discos, los dvds, las giras, la despedida y el reencuentro, mientras las cajas registradoras no pararán de sonar hasta la llegada de la nueva generación y el nuevo proyecto del merchadising.

En estos días, pese a las feroces críticas, el penúltimo –siempre habrá un último- espasmo de la industria musical llamado RBD vuelve a Cuenca. Según el diario “El Nuevo Herald” de Miami, “los Rebeldes demostraron que no cantan, no tocan flauta, ni ningún otro instrumento al menos en escena”.

La crítica es lapidaria cuando dice que "lo que sí faltaron fueron voces protagónicas, ya que ninguno sobresalió como cantante. Sus voces, por lo general, endebles y desabridas, carecían de dominio en la modulación y escucharlos por casi dos horas resultó desesperante".

Mientras que Jordan Levian, la comentarista del diario “The Miami Herald”, señaló que "es difícil escribir una crítica musical sobre RBD cuando la música no es lo que cuenta". Y termina de una forma satírica y despiadada: "en gran parte del concierto, la audiencia estaba cantando tan fuerte que era difícil escuchar al grupo RBD. Lo que les venía bien".

Pero, no todos los artistas que en los últimos tiempos vienen a Cuenca están en la decrepitud de sus carreras o son como los RBD -con fecha de caducidad-. Hay que aplaudir a los empresarios que en los últimos tiempos han traído a grupos de gran calidad artística como Moenia y que próximamente presentarán a Panda.

martes, abril 03, 2007

Jesús Camp y el ayuno

El apretado terno habano y la camisa que oprimía su cuello revelaban que había subido de peso. El exuberante pastor con el micrófono en su mano derecha, se secaba el sudor de la frente con su pañuelo en la otra mano y se movía por el escenario de la iglesia. Dirigía su prédica a un tema que no le favorecía nada: el ayuno.

Dos días antes, lo vi en un patio de comidas a las 5 de la tarde. Llevaba en su bandeja un variado surtido de roscas, pastas y bebidas. En ese momento no me importó. Al final, cada quien hace lo que quiere con su vida.

Pero cuando apareció en el sermón dominical para hablar de los varios tipos de abstinencias, no pude más que soltar una carcajada por semejante hipocresía. Lo que me llamó luego la atención fue una de sus frases: “el ayuno nos libera de los demonios”. O sea, el pobre está atrapado por legiones de luciferes.

Han pasado dos años de aquella escena. Me ha vuelto a la mente el mencionado predicador cuando he visto, gracias a la piratería, hay que admitirlo, el documental “Jesús Camp”.

La película enfoca el adoctrinamiento en las iglesias evangélicas de Estados Unidos a los niños en campamentos de verano. La pastora evangélica Becky Fisher es tan voluminosa que provoca temor a la primera impresión. Se encarga de llevar a los niños a los cuarteles de “Kids On Fire Summer Camp”.

Allí, junto a otros instructores, se encargan de enseñarles a hablar como adultos a niños que van de los seis a los doce o trece años. Les llaman “soldados de Cristo” en ese proceso de forzosa maduración para la guerra religiosa del futuro. Veneran una imagen de George Bush como si fuera un Dios. Los hacen llorar y temblar cuando entran en trance con los brazos en alto.

En el proceso de formación les “enseñan” que el calentamiento global es mentira; que la teoría de la evolución darwiniana no existe y es una herejía; que Harry Potter es enemigo de Dios; que la Tierra solo tiene 6.000 años; entre otras patrañas más.

Pero el documental también enfoca el otro lado. El periodista Mike Papantonio denuncia el fundamentalismo evangélico que no respeta la división entre Estado e Iglesia. Revela que están formando a los futuros líderes republicanos bajo el artificio religioso. Al final se enfrenta con la pastora Fisher en un programa de radio.

“Jesús Camp” es una excelente película para verla durante la Semana Santa. A ver si alguien les hace llegar una copia a esos sepulcros blanqueados que cada domingo se golpean el pecho proclamando el ayuno, la penitencia y la caridad en nombre de Dios. Ya lo dijo Gandhi: Todo lo que se come sin necesidad, se roba al estómago de los pobres.

domingo, abril 01, 2007

¿Simples coincidencias?

Es el comentario que copa la atención de los cuencanos en charlas, pasillos, cafés, restaurantes, reuniones sociales o de trabajo en estos días. No es precisamente acerca de la crisis jurídico-política del país. Tampoco se trata de la Semana Santa que viene o de la celebración de los 450 años de fundación de Cuenca. Es el escandaloso intercambio de favores ocurrido en la empresa Hidropaute.

El colega universitario, el pariente cercano, el amigo, el alumno o el oyente que nos llama al teléfono o envía sus mensajes por celular, correo electrónico o fax coinciden en condenar el presunto tráfico de influencias, del que el ministro de Energía y Minas, Alberto Acosta, no pudo rebatir cuando vino a la ciudad.

Bajo la desgastada figura de la denuncia, el diputado Carlos González lanzó al país, el viernes 23 de marzo, la acusación de “irregularidades en seguros de Hidropaute”. El plan se puso en marcha. Los siguientes días vinieron las aclaraciones de los aludidos justificando sus procedimientos. Pasaron por los micrófonos de la radio el Presidente Ejecutivo de la empresa René Morales y el ex-presidente del directorio Paúl Carrasco.

Todo se perfeccionó cuando el mismo ministro Acosta, la tarde del jueves 29 de marzo, anunció el nombramiento de Esteban Albornoz, primo hermano del diputado como nuevo presidente de una de las empresas públicas más grandes del Ecuador. “Son simples coincidencias”, dijo el secretario de estado ante el cuestionamiento de Carlos Ochoa.

Lo que pocos saben es que Hidropaute S.A. es la tercera empresa con más activos del Ecuador, solo detrás de Petroecuador y el Oleoducto de Crudos Pesados (OCP). Es la cuarta que más impuesto a la renta causa. Es la quinta empresa que más gana con utilidades de 59 millones de dólares en 2004. Nada de pérdidas como arrojan otras enormes empresas estatales como Andinatel, Pacifictel o Telecsa. O sea, Hidropaute ha sido eficiente pese a pertenecer al sector público tan criticado por los privatizadores.

El removido Presidente Ejecutivo llegó a ese cargo por concurso de méritos y suma treinta años de experiencia. Mientras que el primo del diputado, que se desempeñaba como asesor de la institución y es presidente del Colegio de Ingenieros Eléctricos del Azuay, fue designado directamente por el ministro.

Si alguien creía que en el gobierno del presidente Rafael Correa se iba a acabar el palanqueo; el toma y dame; la compra de conciencias, estaba muy equivocado.

Pero no solo es el diputado naranja el favorecido de la palancocracia. También lo es el otro diputado gobiernista, Fernando Cordero, quien ya va cobrando tres cargos en la burocracia a cambio de su voto: la secretaría del CONAMU y la subsecretaría de SEMPLADES para María Caridad Vázquez y la Corporación Aduanera Ecuatoriana, CAE, para Gerardo Maldonado. Pero este será otro tema para comentarlo.