domingo, diciembre 31, 2006

Cuencanos renovaron la música joven en 2006

Desde hace más de veinte años, el último sábado de cada diciembre, Super 9'49 FM presenta su resumen musical de los últimos doce meses. A más de escoger la típica mejor canción, también se preocupa por darle importancia a otras categorías. Una de ellas es la de Mejor Artista Nacional.

Desde entonces, bandas cuencanas como Sobrepeso, Bajo Sueños o La Dueña han sido reconocidas como las mejores y, podría decirse que el premio constituyó para sus integrantes un especial incentivo en sus carreras y un apreciable dato para su palmarés. Además porque, en su momento, vencieron a bandas o cantantes de todo el país.

Sin embargo, este 2006 los cinco grupos nominados tuvieron, por primera vez, la particularidad de que todos eran cuencanos o alguno de sus integrantes era de la capital azuaya. Además, y quizá lo más llamativo, todas fueron bandas nuevas. Súmemosle a esto que otros grupos, también de Cuenca, se quedaron sin ingresar al selecto club de los cinco que compiten, como es el caso de Los Zuchos del Vado, Dioscidencia y Basca.

Renovación es la palabra que resume este 2006 en materia de música joven en nuestro país. Al final, el premio fue para Maradona (foto), banda de electropop que, a inicios del año, llegó al primer lugar de Las 20 Casillas 9'49 con "El Pop Me Devolvió a Carlota", se presentaron en la elección de Miss Ecuador y además aparecieron en la lista de la revista Rolling Stone, edición latinoamericana. Su propuesta alejada del tradicional rock guitarrero explora lo electrónico, sin caer en lo vanguardista.

Para 2007 su reto será presentar el álbum y nuevas canciones, pero también deberán decidirse si continúan haciendo música por pasarla bien o dan el paso adelante para entrar de lleno en el circuito musical profesional.

El sonido pop punkero entre Simple Plan y Green Day inspira a los F-16 que han tenido un rápido ascenso como los aviones de combate que llevan su nombre. Para el nuevo año acaban de lanzar una nueva canción (Fue Fácil Sustituirte), en donde se nota la evolución en letras y música más acabadas y sonido mejorado. Este año abrieron en Guayaquil en el Estadio Modelo el concierto de Caramelos de Cianuro.

Con un estilo parecido, pero marcando distancias a partir de que cantan en inglés, el idioma del rock, los XL o Extra Loosers, nos trajeron a finales de 2006 un demo de canciones propias y dos covers de The Cure, su banda inspiración. La canción "Gone So Young", si bien necesita mejorar la pronunciación en el otro idioma, está bien lograda y por eso les llegó esta nominación.

Bajo la influencia de pesos pesados como Radiohead o Pink Floyd, los independientes (indies) La Ventana presenta su primer disco y, para 2007 su segundo cd. Juan Diego Arias, cantante y creador de casi todas las canciones, se preocupa no solo de la parte musical, sino también de la lírica y del diseño de la portada. "Insomonio" y "10-80" fueron los temas que llegaron a la lista de Super 9'49. Ahora, para 2007 cambian un poco el estilo retro para abrirse con un tema apto para todo público y que además habla de Cuenca: "Cinco Minutos Para Una Sorpresa". Puedo apostar por esta canción.

Una banda nueva, que a ratos se parece más a un proyecto por las diversas ocupaciones de sus integrantes, con sonidos noventeros, es Zebra, en la que resalta la reconocida voz del cuencano Toño Peña. Súmele la guitarra del lojano Hittar Cuesta y tendremos como resultado un buen trabajo. Tiempo para promocionar es lo que más les falta.

Finalmente, 2007 empezaremos con el guayaquileño Leo Mass que suena muy bien con "Sumak Warmi", las nuevas creaciones de Maradona, F-16, La Ventana y todos los que lleguen a la radio con un demo bajo el brazo y que reúnan, sobre todo, calidad artística y lo básico en técnica. Las puertas están siempre abiertas.

martes, diciembre 26, 2006

El burrito sabanero, Pink Floyd, Queen y el stress

Fue la noche del sábado 23 de diciembre. La Dirección de Cultura municipal había invitado a una velada de coros y villancicos. Llegar al centro de la ciudad, a la altura del ex-colegio Borja, desde Puertas del Sol no tomó más de cinco minutos. Pero desde ahí hasta el parqueadero, seis cuadras más adelante, hubo de pasar media hora. El tráfico irritó a más de uno.

Pitazos, frenazos, cruces de carril, irrespeto al semáforo rojo y un sufrido avance colaboraron en elevar la carga de stress en casi todos los que iban al volante y sus acompañantes. La cosa se puso peor cuando un bus estuvo detrás del carro de uno enseñando sus luces y otro a lado tratando de meterse en nuestra vía.

Ya en el parqueadero, no había espacio. Estaba lleno. Ruegos de por medio y la fortuna de la salida de varios vehículos del lugar, permitió encontrar el lugar deseado. Luego en la calle Benigno Malo, entre Gran Colombia y Bolívar, una conductora tuvo que realizar una maniobra peligrosa ante el cruce agresivo de un camión repartidor de Panesa, cuyo conductor estaba atrasado en la entrega del pan de pascua. Su pequeño vehículo invadió la vereda izquierda, si no, había un choque seguro. Detrás, el comedido y exasperado conductor de un Montero se bajó y arremetió a puñetazos al chofer del furgón que también respondió desde su cabina. La cosa no pasó a mayores.

Esto no se quedó ahí. En la vereda de enfrente dos ebrios ensangrentados -seguro que venían de algúna riña-, se la agarraron con un ciudadano entrado en canas, por las puras ganas de encontrar alguien con quien desquitarse. Igual que en el asunto anterior, la cosa no empeoró. Cada uno siguió su camino. Todo esto en menos de cinco minutos. El stress le ganó ampliamente al espíritu navideño.

Con este prólogo, no daba ganas de caminar hasta el parque para ver a los coros, a los que ya se les escuchaba. Sin embargo, no sonaba ningún tema navideño. Los niños cantaban "We don't need no education. We don't need no thought control. No dark sarcasm in the classroom. Teachers leave those kids alone. Hey, Teacher leave those kids alone...". Era el famoso coro de "Another Brick In The Wall" de Pink Floyd, que no tenía nada que ver con la fecha. Además es una canción insurgente anti-sistema.

Luego unos niños se encargaron de ubicar el ambiente con los típicos temas de la ocasión. Pasando por "Rodolfo el Reno", "Noche de Paz", "El Burrito Sabanero" y más. Hasta que subió un grupo de percucionistas, con tambores y se lanzaron otro tema rockero, pero no navideño, el muy aplaudido "We Will Rock You". Más adelante, los "Clowndestinos" presentaron un squetch cómico y celebrado por los asistentes. Y de nuevo los villancicos, para terminar con un trío peruano tocando melodías latinoamericanas.

Todo esto sucedió en la calle Sucre, frente al Municipio. Más allá en la Bolívar y Benigno Malo continuaron, como todos estos días previos a la Nochebuena, los bocinazos, los nervios crispados, los deseos inconfesables al prójimo que no avanza en el carro que va adelante de uno, los ansiosos estresados que van atrasados, los pequeños mendigos extendiendo la mano y los recuerdos de que antes, en nuestro tiempo de niños, la Navidad era mucho menos complicada y materialista. Y mucho más feliz.

jueves, diciembre 21, 2006

Postal de la miseria

Esta foto la tomé con el celular a las 17h40 del lunes 18 de diciembre pasado. Es la calle Leopoldo Dávila Córdova, como dice el letrero, una de las vías cercanas a la Feria Libre de El Arenal.

Son siete cargadores, seis de ellos están tirados en la vereda y el otro apenas se mantiene en pie. Unos veinte metros más allá, hay tres mujeres de pollera y un hombre sentados y, al igual que el grupo de la foto, están completamente borrachos.

Han terminado su jornada. Acaban de salir de una de las miserables tabernas que sobran en el sector. Unos duermen su penuria y otros balbucean frases de una canción del desdichado pentagrama de las cantinas. Tienen cara de boxeadores machacados. Viven sobre piso de tierra en cuartuchos de madera, sin agua y sin luz. La promiscuidad y los olores repugnantes son su hábito.

Su espectativa de vida no pasa de los 40 años. Mueren vomitando sangre, atropellados por vehículos, de frío en la madrugada o ahogados en su propio espasmo. Son los "NN" que la crónica roja recoge en pequeños espacios. Al final, no son más que infelices cargadores llegados de los páramos de la sierra norte.

¿Podemos hacer algo para cambiar esta postal indeseable de Cuenca, Patrimonio Cultural de la Humanidad?

Espero que esta nota la lean quienes se enriquecen con el comercio de bebidas alcohólicas, atesorando enormes ganancias en estas fechas, medios incluídos; así como, quienes están en las áreas sociales del gobierno y aquellos que viven realizando eternos diagnósticos de la pobreza. Para ver si les agarra un poco de remordimiento en estas fiestas.

domingo, diciembre 17, 2006

Cerati el más nominado y los Maradona de Cuenca pugnan por la mejor canción

El rockero argentino Gustavo Cerati alcanzó cuatro nominaciones a la hora de los balances de 2006. Este sábado 30 de diciembre se elegirán los mejores en cada categoría de las “Super 9’49 del año”. Asimismo, la banda cuencana Maradona (foto) opta por el premio al mejor disco del año.

El ex-Soda Stereo ha sido recompensado con una excelente crítica por su álbum “Ahí Vamos”. Está mencionado para las categorías de “Mejor Canción” por el tema “Crimen”; “Mejor Álbum” por “Ahí Vamos”; Mejor Solista Masculino y Mejor Artista Latino.

Las Super 9’49 de 2006 escoge entre 9 categorías y 49 nominaciones lo más distinguido del año musical. En esta ocasión también emergen con tres nominaciones la nueva banda Panic At The Disco, los veteranos Red Hot Chili Peppers, el trío de pop electrónico Belanova y el exmilitar James Blunt.En la categoría “Artista Nacional”, por primera vez, los cinco nominados son o tienen origen cuencano: la banda electro pop Maradona, los neo punks XL, los pop punkers F16, los retrorockers La Ventana y los pop rockeros Zebra, cuyo cantante es el cuencano Toño Peña.

Es de resaltar que los Maradona están nominados para la prestigiosa categoría “Mejor Canción del Año” por “El Pop Me Devolvió a Carlota”, single que estuvo tres semanas en el número uno de “Las 20 Casillas 9’49” durante los meses de enero y febrero.

La lista de los nominados es la siguiente:

MEJOR CANCIÓN

El Pop Me Devolvió a Carlota (Maradona)
You’re Beautiful (James Blunt)
Me Pregunto (Belanova)
Dani California (Red Hot Chili Peppers)
Crimen (Gustavo Cerati)
Crazy (Gnarls Barkley)
I Write Sins Not Tragedies (Panic! At The Disco)
The Saints Are Coming (U2 con Green Day)
Narcisista Por Excelencia (Panda)

SOLISTA MASCULINO

James Blunt
Robbie Williams
Gustavo Cerati
Justin Timberlake
Chamillionaire

SOLISTA FEMENINA

Madonna
Julieta Venegas
Nelly Furtado
Christina Aguilera
Fergie

DUO O GRUPO

Depeche Mode
Black Eyed Peas
Red Hot Chili Peppers
Keane
Maná

REVELACIÓN

James Blunt
Belanova
Gnarls Barkley
Blue October

Panic! At The Disco

CANCIÓN ROCK

Jesus Of Suburbia (Green Day)
Steady As She Goes (The Raconteurs)
When You Were Young (The Killers)
Welcome To The Black Parade (My Chemical Romance)
Lips Of An Angel (Hinder)

ÁLBUM

Confessions On A Dancefloor (Madonna)
Stadium Arcadium (Red Hot Chili Peppers)
Ahí Vamos (Gustavo Cerati)
Under The Iron Sea (Keane)
A Fever You Can’t Sweat Out (Panic! At The Disco)

ARTISTA LATINO

Panda
Belanova

Los Bunkers
Gustavo Cerati
Julieta Venegas

ARTISTA NACIONAL

Maradona
Zebra
F16
La Ventana
XL

La cita con lo mejor del año es este sábado 30 de diciembre desde las 9 de la mañana en Super 9’49 FM.

miércoles, diciembre 13, 2006

¿Podemos ser imparciales con Pinochet?

Desde hace tiempos, pensaba decir por la radio el día en que se muera algo así como: “el exdictador genocida y ladrón Augusto Pinochet se fue al infierno”. Sin embargo no lo dije por respeto al formato informativo-noticioso. Me quede con las ganas, hasta este momento.

Si los manuales apadrinan el periodismo independiente; el de los datos fríos y precisos; el de la “imparcialidad” a rajatabla; entonces, aprovecho este rincón personal para decir lo que me ha provocado Pinochet en los últimos 33 años:

- Desprecio y aborrecimiento por todo lo que hizo: traicionar, asesinar, perseguir, torturar, censurar, robar y hasta fingir enfermedades para escurrirse de la justicia. “Odio” es una palabra muy dura que enferma a quien lo siente. A él lo he detestado.

- Comprensión al nieto del asesinado general Carlos Prats por lanzar un salibazo sobre el vidrio del féretro que separaba la aderezada cara del monstruo del resto del mundo.

- Respaldo al grupo de manifestantes que hace algunos años, cuando en Cuenca se jugaron algunos partidos de un Mundial de la FIFA de categorías menores, en un encuentro de la selección de Chile, desplegaron una bandera que decía “Pinochet asesino” y que fueron brutalmente desalojados de las gradas de general del estadio por la policía.

- Admiración por Salvador Allende y su pensamiento, pero sobre todo, por su conmovedor y profético discurso de despedida desde La Moneda el 11 de septiembre de 2003. A través de Radio Magallanes decía: "Trabajadores de mi Patria, tengo fe en Chile y su destino. Superarán otros hombres este momento gris y amargo en el que la traición pretende imponerse. Sigan ustedes sabiendo que, mucho más temprano que tarde, de nuevo abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre, para construir una sociedad mejor".

- Estupor porque hay gente que le llama “héroe” y le da las “gracias” y por el arzobispo de Santiago que justificó al criminal, junto con el capellán militar que dijo que ahora “Pinochet está junto a Dios mirando su rostro”.

- Conformidad por la decisión de las Fuerzas Armadas Chilenas de expulsar de sus filas al nieto del dictador por sus provocadoras declaraciones políticas. Más allá de la comprensible defensa de su abuelo, la rápida respuesta de los más altos comandantes militares revela que, hoy en día, otro es su pensamiento.

- Confianza en que llegue, por fin, la conciliación al pueblo chileno.

- Seguridad de que en Chile nunca habrá una avenida, una calle, un monumento, ni siquiera un callejón que lleve su nombre.

Al final me quedo con un par de frases que leí en un blog: “pocas veces he deseado tanto que exista el infierno”; y, “lástima que haya muerto, podía haberse quedado siempre enfermo hasta que nadie en el mundo se acordase de él”.

¿Imparcial con el tema Pinochet? No puedo, por favor.

lunes, diciembre 11, 2006

Pulse, una maravilla sónica

Siempre he creído que la música se hizo solo para escucharla y que el video es una prebenda para los mediocres y las poderosas discográficas que piensan más en cajas registradoras que en talento.

Así, hemos visto excelentes piezas de tres o cuatro minutos en video como “Weapon Of Choice” con el actor Christopher Walken bailando y volando en el vestíbulo de un hotel, pero, seamos sinceros, la música no se compadece con lo visual.

Pocas, muy pocas veces, el video se adapta a lo que el músico lo expresa para los oídos, como por ejemplo el “Bohemian Rhapsody” de Queen. De ahí que, tomando las palabras de Charly García, la música se hizo para escucharla, no para observarla.

Una cosa es que a uno le den viendo, con los ojos de los mismos músicos, productores, camarógrafos y cineastas al fin; y, otra es que la música que se filtra por nuestros oídos nos haga imaginar y soñar. Sentirla y disfrutarla, en definitiva, a nuestro modo.

Y si hablamos de Pink Floyd, más aún. A no ser que un monstruo como Alan Parker toque nuevamente la varita mágica y adapte una obra conceptual como “The Wall” al cine, qué podríamos esperar al oír, por ejemplo, todo el álbum “Animals”, mi disco engreído de su legado. Creo imposible que un video pueda incrementar las sublimes sensaciones que provocan “Pigs (Three Diferent Ones)” “Dogs” o “Sheep” justo antes de dormir, al reposar mi cabeza sobre la almohada, oración de por medio, e introducirme plácidamente en el sueño con la perspectiva del nuevo día que se estrenará en unas cinco o seis horas más.

Por eso, cuando hace pocos días, cayó en mis manos el dvd de “Pulse”, que ya lo había visto en vhs hace algunos años, me dije: Okay, lo llevo para saber cómo suena en calidad 5.1 (sonido envolvente). Pagué los 19,99 dólares en el almacén del Mall del Río, sabiendo que lo podía conseguir por solo 1,50 de cualquiera de esos vendedores que llevan parche en uno de sus ojos. Aunque también pensé que, el hecho de sacar el dvd de un concierto de hace doce años, me sonaba más al penúltimo acto de merchandising de la máquinaria facturadora pinkfloydiana.

Pero, gracias a Dios, me equivoqué. “Pulse” es, de largo, el mejor dvd musical de este año. Por varias razones:

1) El sonido. Había leído una advertencia que señalaba que para oírlo mejor en 5.1, no debía ser procesado. Así lo hice. Le puse el estándar técnico de fábrica al equipo, sin nada más adicional. Eso sí, a todo decibelio. Resultado: una de los mejores resonancias que haya escuchado hasta ahora. El sonido envolvente lo ubica a uno en medio del Earls Court Exhibition Centre de Londres, donde tocaron catorce veces seguidas allá en 1994 para traer al mundo “Pulse”. Es de anotar que el encargado de ponerlo en 5.1 fue James Guthrie, el virtuoso productor de la banda.


2) Lo visual. Dejando en claro que una cosa, es el video clip y otra el espectáculo visual del concierto; el despliegue de lásers, luces y sistemas de proyección ante el fastuoso escenario: un enorme arco que aloja una pantalla de video. Es tan grande esa atmósfera que a David Gilmour, Richard Wright, Nick Mason y los demás se los ve diminutos en la perspectiva general. Además, la sincronización del director de cámaras para ubicar esa toma en el momento preciso es digna de destacar.


3) Los extras: En los dvds clonados, generalmente los extras son eliminados por razones de espacio en el disco. Aparte de eso, “Pulse” trae varias novedades en sus dos discos, aparte de las dos horas y media del concierto. Hay videos captados por aficionados, video clips de un par de canciones y de los cortes presentados en concierto para verlos por separado. Además hay información gráfica acerca del itinerario de la gira, decenas de fotos y la construcción del escenario. Súmele a esto un video de la inducción de Pink Floyd al Salón de la Fama del Rock en 1996, en donde tocan en acústico “Wish You Were Here” con Billy Corgan de Smashing Pumpkins como invitado especial. Hay más todavía: ocho páginas de fotos e información a cargo del famoso diseñador de carátulas Storm Thorgerson.

Por todo esto, mi recomendación final: “Pulse” es satisfacción garantizada, pese a que ahí falta el genio de Roger Waters, imprescindible como el desaparecido "diamante loco" Syd Barrett a la hora de hablar de uno de los mejores grupos de la historia del rock.

miércoles, diciembre 06, 2006

Sociedad del miedo

Después de escuchar la nota del rapto de un niño de seis años de la escuela fiscal Ezequiel Crespo, liberado cinco horas después, me he puesto a pensar acerca de su autenticidad. ¿Secuestro express? ¿Plagio? ¿O una simple confusión?

Hay cosas que en esa historia no calzan como, por ejemplo, el papel que jugó la policía con la familia y hasta con los directivos del centro educativo; o, si al final fue un secuestro frustrado, nunca hubo una petición de dinero para así calificarlo.

De los testimonios que he recabado, al parecer la historia va así: una señora que conocía al chico le quiso ayudar a encontrar la mochila olvidada en la furgoneta escolar. Al no poder ubicar el vehículo, lo llevó a su casa y con un joven le mandó a dejar en la casa del tío del menor. Fin de la historia.

Sin embargo, un relato de estos nada tiene de noticiable, si no fuera por la alarma generada por cuatro casos de secuestro registrados en el Azuay en este año, según datos policiales; y, en especial por el reciente de un empresario liberado a los dos días del plagio.

En el magnífico documental “Bowling For Columbine”, Michael Moore sugiere que el miedo es el arma ideal que utilizan los medios de comunicación para, en principio, capturar las audiencias, pero, sobre todo, para manipular a la sociedad.

Recién nacidos abandonados en basureros, “dulces sueños”, “paquetazos”, robos, asaltos, violaciones, entre otros, llenan las páginas de la prensa, todos los días. Pero la pregunta que quizás nos debemos hacer es, si el índice delincuencial es menor que hace un año, dos o cinco. Es posible que así sea.

En 1988, se implantó una especie de psicosis con la llegada del dengue a Cuenca. Recuerdo que primero se registró en Guayaquil, luego en Naranjal y después en Machala. Hasta que llegó a Cuenca el primer caso en el Hospital Regional Vicente Corral Moscoso. Era un enfermo oriundo de la provincia de El Oro, al que le cayeron flashes, grabadoras y cámaras.

El revuelo enorme del dengue pasó, en pocas semanas, a convertirse en un dato más de las pandemias tropicales que, de vez en cuando, incrementa el número de enfermos. Hoy ni siquiera ese aumento ocupa los titulares.

Sucedió igual con el ántrax después del 11-S. Y últimamente con la gripe aviar. ¿Novelería o exageración?

De otro lado, la principal causa de muerte en los jóvenes cuencanos es la violencia (accidentes de tránsito, riñas, caídas, entre los principales). Todos sabemos que detrás del 90 por ciento de estas tragedias está la ingestión de bebidas alcohólicas. Sin embargo, los que estamos al frente de los medios de comunicación de Cuenca, poco hacemos por tratar de cambiar esta vergonzosa realidad. ¿Costumbre, hipocresía o compromisos publicitarios con las licoreras?

domingo, diciembre 03, 2006

Poder y pudor

A una semana del triunfo de Rafael Correa, en Cuenca se ha desatado la pugna por captar los espacios de poder de la provincia. El escenario de esta lucha es el de los medios de comunicación.

Apenas conocidos los resultados de la segunda vuelta, esto es el domingo a las 17 horas, nuestros compañeros de la radio reporteaban desde las sedes del PRIAN y de Alianza País.

En la primera, unas cuantas caras largas que se aferraban al imposible de creerle a Consultar y a la retirada disparatada de su líder.

En la segunda, el festejo se desataba. Ahí estaban los elementos locales más visibles de esta campaña. Paúl Granda, Antonio Idrovo, Jaime Abril, por citar algunos. Luego vino una caravana vehicular y un aguacero se encargaba de mandar a todos a sus casas.

También llegaron al festejo los chuchumecos, aquellos recién llegados que siempre se asoman a repartir abrazos y congratulaciones luciendo la mejor de sus fingidas sonrisas.

Son los que, a primera hora del lunes, viajaban a Quito, a hacer lo que mejor saben: el palanqueo. No es difícil creer que, a la hora del banquete, se servirán el lomo fino.

En el otro frente, durante toda esta semana han asomado por los medios varios directivos de Alianza País, poco vistos antes, para “agradecer al electorado” y, de paso, plantar los hitos en el territorio apetecido.

Se han autoproclamado como los auténticos y los primeros ciudadanos que apoyaron a Correa cuando fue ministro de Economía y reclaman, sin mayor recato, el derecho a nombrar a la futura administración provincial. Por otra parte, tratan de despejar el terreno, desacreditando a otras directivas y movimientos de la alianza ganadora.

Bien dice Daniel Prieto Castillo en su obra “Análisis de mensajes” (CIESPAL 1988), que hay que saber distinguir entre lo manifiesto y lo latente. Lo implícito, señala, “aparece en la inmensa mayoría de los mensajes de difusión colectiva”. De ahí que, una de nuestras misiones como comunicadores es la de aprender a leer lo latente para aclarar todo lo que el emisor nos está proponiendo.

Estos dirigentes han mediatizado sus ambiciones, bajo la carátula de la gratitud. Lo que está detrás de su acto de decencia, denota que se viene una contienda por la repartición de puestos.

Lo grave es que Rafael Correa aparece como un mandatario diferente a los anteriores, que en campaña denunció el tráfico de influencias; pero, en cambio, una buena parte de sus seguidores, al menos en el Azuay practican lo contrario.

De buenas y variadas fuentes sabemos que entre los que tienen “hambre atrasada” por comerse una porción de la torta administrativa hay seres de lo peor: desde insolventes declarados y tránsfugas de otros partidos, como el PRE; hasta enjuiciados penalmente por, entro otros delitos, haberle agredido físicamente a su anciana tía; sospechosos de coyotazgo; y, una propietaria de una casa de citas que provee de damas de compañía a quien le llame al celular.

¿Qué debemos hacer los periodistas? ¿Denunciarlos ahora o esperar que entren en funciones para que su desgracia sea peor aún?

Lo único cierto es que, con estos señores y a estas alturas, las palabras poder y pudor nunca se cruzan.